Quien dice un salón triangular, dice una columna en medio de la estancia o un ventanal circular que rompe la armonía.
Para muchas personas, aprovechar esos espacios para crear el lugar donde desconectar tras un día intenso de trabajo, disfrutar de una tarde de risas entre amigos o hacer que sus clientes quieran quedarse durante horas sería, como mínimo, un desafío.
¿Cómo encajas ahí la cómoda antigua de tu abuela, que guarda tantos recuerdos familiares? ¿Dónde pones el sofá cuando la toma de televisión está en un rincón imposible?
Lo primero que se te pasa por la cabeza es mirar qué han hecho tus vecinos y copiar su distribución.
Pero la realidad es que TODOS los espacios, hasta los que parecen condenados al caos, están llenos de posibilidades para crear ambientes cálidos y acogedores que respiran personalidad.
Quien dice un salón triangular, dice una columna en medio de la estancia o un ventanal circular que rompe la armonía.
Para muchas personas, aprovechar esos espacios para crear el lugar donde desconectar tras un día intenso de trabajo, disfrutar de una tarde de risas entre amigos o hacer que sus clientes quieran quedarse durante horas sería, como mínimo, un desafío.
¿Cómo encajas ahí la cómoda antigua de tu abuela, que guarda tantos recuerdos familiares? ¿Dónde pones el sofá cuando la toma de televisión está en un rincón imposible?
Lo primero que se te pasa por la cabeza es mirar qué han hecho tus vecinos y copiar su distribución.
Pero la realidad es que TODOS los espacios, hasta los que parecen condenados al caos, están llenos de posibilidades para crear ambientes cálidos y acogedores que respiran personalidad.
Donde se disfruta, se ríe, se sueña… y se crean momentos que te marcan para siempre.
La primera vez que descubrí la magia de transformar un espacio era solo una niña y perdía la noción del tiempo jugando a cambiar de sitio los muebles de casa, ordenando todo por colores y formas… ¡y dibujando sin parar!
La vida da muchas vueltas y con el tiempo acabé convirtiéndome en topógrafa y trabajando más de 12 años en el sector de la construcción.
Pero dicen que uno siempre vuelve a los lugares donde fue feliz.
Por eso, en uno de los momentos más duros de mi vida decidí volver a mi verdadera vocación: dar la vuelta a espacios para convertirlos en lugares que cuentan historias.
Lo que empezó como un refugio, el diseño de interiores, es también mi pasión. Hoy me siento plena creando ambientes donde relajarte, donde ser tú.
Lugares como ese que intuía de niña, pero que no encontraba en ningún mapa.
Porque, como dice el refrán, “las vueltas dan mucha vida”.
O, al menos, eso es lo que yo pienso.
Estos son algunos de los proyectos de decoración de interiores en Cádiz y a distancia que he llevado a cabo para viviendas y locales de restauración.
Me ilusiono en cada proyecto como si fuera mi propia casa, respetando tu presupuesto como si saliera de mi bolsillo porque crear un espacio acogedor no debería comprometer tus finanzas.
Tus espacios deben reflejar quién eres, tus vivencias y lo que es importante para ti, como esa cómoda de la abuela que merece un lugar especial. El valor emocional siempre tiene cabida en un diseño armonioso.
Los lugares que nos marcan no están pensados para ser (solo) bonitos, sino para abrazar tu estilo de vida y hacerte sentir pleno.
Y, además, te permite mantener los recuerdos de los que más quieres. Integro tus piezas favoritas en el proyecto y busco soluciones que respeten el medio ambiente, porque los espacios más acogedores son aquellos que conectan con lo auténtico y lo natural.
A veces, solo hace falta mirar el espacio desde otro ángulo para descubrir todas sus posibilidades. Mi trabajo es encontrar esa perspectiva que transforma lo ordinario en extraordinario.
Me ilusiono en cada proyecto como si fuera mi propia casa, respetando tu presupuesto como si saliera de mi bolsillo porque crear un espacio acogedor no debería comprometer tus finanzas.
Tus espacios deben reflejar quién eres, tus vivencias y lo que es importante para ti, como esa cómoda de la abuela que merece un lugar especial. El valor emocional siempre tiene cabida en un diseño armonioso.
Los lugares que nos marcan no están pensados para ser (solo) bonitos, sino para abrazar tu estilo de vida y hacerte sentir pleno.
Y, además, te permite mantener los recuerdos de los que más quieres. Integro tus piezas favoritas en el proyecto y busco soluciones que respeten el medio ambiente, porque los espacios más acogedores son aquellos que conectan con lo auténtico y lo natural.
A veces, solo hace falta mirar el espacio desde otro ángulo para descubrir todas sus posibilidades. Mi trabajo es encontrar esa perspectiva que transforma lo ordinario en extraordinario.
Tienes un espacio lleno de posibilidades que están esperando a ser descubiertas.
Y mi trabajo es ayudarte a verlas.
Esa esquina que está tan desaprovechada, esa pared que te parece imposible o ese pasillo que te gustaría que deje de parecer una extensión del portal se merecen cobrar protagonismo y empezar a ser vividas.
¿Por qué seguir conviviendo con espacios que te agotan en vez de hacer que te recarguen las pilas?
No se trata solo de estética. Se trata de cómo te sientes al abrir la puerta cada día.
Imagina disfrutar, por fin, de ese “lugar que no está en el mapa” en el que:
Empieza ahora a crear el lugar donde parar el tiempo y disfrutar de la vida.
Sin presupuestos desorbitados.
Sin complicaciones técnicas.
Sin sorpresas de última hora.